“Cristina no habla con nadie de su gabinete, salvo con su hijo Máximo Kirchner, que es drogadicto, medio tonto y que abre la boca sólo para festejar un gol de Play Station”, había dicho Tonelli en durante la inauguración de un local partidista en Quilmes.
Tras sus polémicas palabras pidió disculpas: “Fue un exabrupto de mi parte, totalmente injustificado. Me parece un horror lo que dije. Pido disculpas y lo seguiré haciendo las veces que sea necesario”.
Y añadió: “Soy una persona tolerante, por eso no puedo explicar cómo paso eso. Fue un error, un exabrupto, un momento de la pérdida de la conciencia”. Momento en el que se encontraba en una charla privada con militantes de Quilmes.
De todos modos Tonelli no dejó de lado las críticas hacia la presidenta: “No hay reuniones de Gabinete y habla con muy poca gente. Me gustaría que tuviera más disposición al diálogo, por ejemplo que lo reciba a [Mauricio] Macri o que se siente con [Daniel] Scioli para encontrar soluciones y no perjudicar a los empleados públicos de la provincia de Buenos Aires”.
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