Un masivo éxodo vehicular se dirigía a la costa atlántica con un promedio superior a los 2.700 autos por hora, registro similar al de los días fuertes del verano.
El inusual, y único del año, fin semana largo tendrá seis días de extensión durante los cuales se espera una cifra récord de visitantes, para esta época del año, que colmen los distintos centros turísticos del país.
La Cámara Argentina de Turismo estimó que cerca de unas 2,5 millones de personas se trasladarán por el país durante este fin de semana largo.
Según informó la entidad: “los destinos más elegidos son el interior de la provincia de Buenos Aires (26 por ciento), la zona del Litoral (20 por ciento), Córdoba (18 por ciento) y la región norte (17 por ciento)”.
La reciente elección del Papa Francisco y la coincidencia con las celebraciones de Semana Santa potencian aún más el movimiento relacionado con el turismo religioso, que presenta un incremento del 17 por ciento respecto a la misma época del año anterior.
En la Capital Federal, un relevamiento realizado por el Observatorio del Ente Turismo porteño, con motivo de este fin de semana largo, registraba este miércoles un promedio general de reservas en hoteles de 3, 4 y 5 estrellas de 64 por ciento.
El atractivo de ver una carrera callejera del Súper TC 2000 y el intenso movimiento del turismo religioso de Semana Santa explican la importante demanda de hospedaje en la ciudad de Buenos Aires.
Los días que registran mayor ocupación se concentran entre el viernes 29 al domingo 31 de marzo, en algunos casos con varios establecimientos de cuatro estrellas con capacidad agotada, mientras que la demanda hotelera disminuye notablemente a partir del próximo lunes y martes.
El éxodo de turistas arrancó este miércoles con un importante movimiento en las principales rutas del país, donde se vio que muchos optaron por anticipar su salida para evitar congestiones en el tránsito.
El comienzo de estas ‘minivacaciones’ resultó problemático para muchos turistas que se vieron sorprendidos por una protesta en la estación Retiro, un reclamo que complicó la circulación en la autovía 2 y la congestión de tránsito que ocasionaron obras que se realizan sobre esta ruta.
La protesta en la terminal de Retiro también incluyó un reclamo de un grupo de personas discapacitadas que exigió la entrega de pasajes aludiendo que les correspondía por ley.
En la provincia de Buenos Aires, el ministro de Salud bonaerense, Alejandro Collia, encabezó este miércoles un operativo de control de alcoholemia a choferes de media y larga distancia en la terminal de ómnibus de La Plata.
Unos 30 choferes que fueron sometidos al control de alcoholemia durante la mañana dieron cero gramos de alcohol por litro de sangre, de modo que todos estuvieron aptos para partir.
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