El arzobispo de Buenos Aires y Primado de la Argentina, monseñor Mario Poli, definió la marcha como un “río de vida” y destacó que es la Virgen es quien “convoca”.
El rector del santuario de la Patrona de Argentina, presbítero José Daniel Blanchoud, aseguró que las últimas horas transcurren “con calor y a la espera de los peregrinos”.
A las 12:00, la imagen cabecera, previa bendición, abandonará Liniers para seguir por la ruta 7 desde avenida General Paz llevada en andas por los peregrinos hasta cubrir los más de 60 kilómetros hasta el Santuario Nacional, que caminarán día y noche.
Poco antes de las 7:00 llegará a la Basílica de Luján donde monseñor Poli celebrará la tradicional Misa de recepción de peregrinos que adelantó lo hará como “devoto” en primer término y también como peregrino.
En esta oportunidad, el lema es “Madre, cuidá la fe de tu pueblo que camina” y se les pide a los peregrinos que lleven al santuario de San Cayetano, Cuzco 150, del barrio porteño de Liniers, un alimento para Cáritas.
El padre Blanchoud, responsable pastoral del santuario y coordinador de una decena de sacerdotes que colaboran en el santuario, informó que el templo abrirá sus puertas el sábado a las 7:00, y permanecerá abierto hasta el domingo a las 20:00.
Serán dos jornadas que acercarán a los miles de peregrinos los sacramentos de la reconciliación y la comunión eucarística y algunos recibirán el bautismo en un sitio previamente especificado.
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