El evento reunió durante el fin de semana a feministas de todo el país para debatir sobre derechos de la mujer, trata, violencia y aborto.
Mientras ardía el muñeco, las activistas gritaban consignas contra la Iglesia, tales como: “Ni una sola muerte más por aborto clandestino”, “Saquen sus rosarios de nuestros ovarios” y “Si el Papa fuera mujer, el aborto sería ley”.
Alguno temas que se debatieron en el encuentro fueron: “Mujeres y bisexualidad”; “Mujeres de los pueblos originarios”; “Mujer y trabajo”, “Mujer y Salud”, “Mujeres y trata de personas”, “Mujeres trans”, etcétera. Toda una temática atravesada por la llamada “teoría de género”.
“La quema de la imagen del papa Francisco es una ofensa, y no solamente a la Iglesia, sino a cada uno de los argentinos, porque el Papa es argentino”, dijo el párroco de la Catedral de San Juan, padre Rómulo Cámpora, al Diario de Cuyo. “Quemar la figura del Papa y quemar la bandera de nuestro país, es lo mismo. Linda imagen hemos dado al mundo, ¿no?”, agregó.
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