El funcionario aclaró que hay deudas que no pueden ser incluidas en el nuevo plan de deudores porque ya pertenecen al ámbito penal, tal es el caso de HSBC, que le debe a la AFIP 240 millones de pesos.
Lo mismo sucede con las empresas que anotaron preexistencia de granos que no tenían para pagar menos impuestos. Cargill debe 228 millones dólares, Bunge 126 millones dólares, LDC 141 millones, Aceitera General Deheza 48, Molinos Río de La Plata 197, etc.
“Así está el sector cerealero que frente a una avivada no están incluidos en el nuevo plan de deudores, porque son los que más ganan y los que menos pagan. Sí tiene un plan de regularización fiscal para mantener el empleo”, dijo Echegaray.
Lo más importante en este momento son “las 120 cuotas, 1,35% mensual y sin pago a cuenta. No es una necesidad de recaudación inmediata sino de ayudar al contribuyente para que pueda cumplir con las obligaciones”, agregó.
“Al mismo tiempo hemos establecido una tasa muy buena y esperemos a futuro que las entidades bancarias tomen la misma actitud cuando el contribuyente se retrasa en el pago de impuestos”, aseveró.
Según la Resolución General 3451 publicada hoy en el Boletín Oficial, dice que la medida “contracíclica conducente al desarrollo estructural de las empresas, a la generación de empleo, al mantenimiento de las fuentes de trabajo y al fortalecimiento del poder adquisitivo de los ciudadanos y, con ello, la consolidación de la demanda y del mercado interno nacional”.
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