ARA: Portaaviones V-1 "Independencia"
El portaaviones V-1 "ARA Independencia"
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Los estudios preliminares de la adquisición
En 1953 se inicio un serio estudio, tendiente a lograr un portaaviones para la Flota de Mar. Un de los proyectos consistia en la transformación de un buque de la F.A.N.U., tipo C3A-A1 (el "Artillero"),el cual a un costo de $m/n 20 millones se pensaba volverlo a su anterior estado, ya que había sido un portaviones de escolta de la armada británica. Otro proyecto era el transformar uno de los cruceros tipo "Almirante Brown" en portaaviones. Los trabajos se realizarían en AFNE. Por problemas financieros, los proyectos no pasaron de tales"
El interés de la ARA en adquirir una nave portaaviones, sin embargo se remonta al año 1938. Entre una serie de sumamente detalladas noticias aeronáuticas concernientes a nuestro país que contiene un reporte de la embajada de los EEUU en Buenos Aires , fechado 3 de Septiembre de 1938 hallamos la siguiente :
" Varios pilotos navales han declarado que el Almirante Scasso había expresado la esperanza de que podría adquirirse un portaaviones para la marina de guerra. Se entiende que no existen prospectos inmediatos de proveer tal tipo de nave, pero se porta que la información es indicativa de las tendencias al respecto". (1)
Estos deseos no se habrían de materializar, como es de dominio publico, algo demostrado en el hecho de que cuando en 1940 el Congreso apropia $ m/n 1000 millones para acrecentar el potencial del país, entre las naves requeridas se hallaban dos acorazados, pero no se hace ya mencion del portaaviones. Debemos señalar que dada la situación internacional prevaleciente, era poco probable que esta parte del programa de re-equipamiento pudiera haberse cumplido. Recien en 1947 hallamos evidencias del renovado deseo, por parte de la ARA, de obtener un portaaviones. En una carta fechada 20 de Diciembre de 1946, W.H. Collin, Vice-Presidente de la División Astilleros de la Betlehem Steel Company informa al Secretario de Estado de los EEUU que la firma que él representa ha recibido una invitación del gobierno argentino para someter propuestas para la construcción de un portaaviones escolta, un crucero liviano, cuatro destructores, 3 submarinos, un buque-taller, un petrolero y un transporte de tropas para la ARA.
En una carta fechada 9 de Enero de 1947, el Secretario de Estado informa a Collins que el gobierno de los EEUU ha estudiado detenidamente esta propuesta, y que "por el presente, la política del gobierno de los EEUU es la de no proveer armas, armamentos o buque de guerra a un número de gobiernos extranjeros, inclusive el de la Argentina, y que en vista a dicha política, el Departamento de Estado no otorgaría una licencia de exportación, en caso de que estos buques sean construidos en los EEUU". (2)
Las relaciones diplomáticas entre los EEUU y la República Argentina mejorarían en años venideros, de tal forma que en 1950 el gobierno argentino cursa la siguiente nota al embajador norteamericano en Buenos Aires:
Ministerio de Relaciones Exteriores No. 369-Año del Libertador General San Martín, Buenos Aires, 23 de Febrero de 1950.
A Su Excelencia el señor Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de los Estados unidos de América, D. Stanton Griffis.
Un despacho de la embajada norteamericana en Buenos Aires al Departamento de Estado clarificaba la situación :
El Congreso argentino ratificó el Pacto de Defensa de Río de Janeiro el 28 de Junio, tres días después de haber estallado la guerra de Corea. Debemos preguntarnos que curso dieron las autoridades norteamericanas al substancial pedido de unidades navales por parte de la cancillería argentina. Ante la ausencia de documentos que puedan afirmar o contradecirnos, los EEUU acordaron vender dos cruceros livianos de la clase "Brooklyn" a tres países sudamericanos; Argentina, Brasil y Chile, cada uno de los cuales pudo de esta manera adquirir dos unidades . Como es de dominio público, aquellas naves asignadas a la Argentina fueron el ex-U.S.S. Phoenix (CL 46) que en nuestra armada se convertiría en el "17 de Octubre", y más luego en el "General Belgrano", y U.S.S. Boise (CL 47). que seria bautizado "Nueve de Julio" al afirmarse el pabellón argentino el 12 de Abril de 1951. (4)
Recién en 1955 , hallamos nueva referencias al requerimiento de un portaaviones por parte de la ARA. El 27 de octubre de ese año, nuestro embajador en Washington envía una nota a John Foster Dulles, Secretario de Estado en la que expresa :
Señor Secretario : Tengo el honor de informarle que mi gobierno desea adquirir un portaviones (CV.L. ) y aviones correspondientes. Es de esperar que la operación deba ser similar an su forma a aquella bajo la cual se adquirieron el ex-USS "Boise" y el ex-U.S.S. ""Phoenix" .Demas que decir que no hallamos respuesta alguna a dicha nota en las cajas de correspondencia diplómatica que se encuentran en los Archivos Nacionales de Washington (5 )
.Sin embargo, en una nota fechada 7 de Febrero de 1957, hallamos un pedido efectuado por el Embajador argentino en Washington Dr. Adolfo A. Vicchi:
"1-El embajador indicó que deseaba referirse nuevamente al tema del portaaviones. Han recibido una oferta firme de parte de los británicos, agrego por la venta a la Argentina de un portaaviones de la clase "Magnificent". Esto, sin embargo seria costoso y la marina de guerra argentina quisiera proponer que los EEUU consideren las posibilidades de proveer un pequeño portaaviones de escolta de la clase "Sicily". Este sería utilizado solamente para funciones de entrenamiento. La marina argentina considera que en para poder desarrollar su capacidad anti-submarina , debería entrenar y preparar a su personal en buques de este tipo. Si dicho buque puede ser obtenido en los EEUU, sería de gran valor para ambos, la Argentina y la defensa del hemisferio.
Mr. Rubottom dijo que no veía posibilidad alguna de que los EEUU modificaran su política ya establecida en estos asuntos. El embajador agrego que había sido instruido a presentar ese pedido y pidió que los EEUU lo considerasen. Mr. Rubottom prometió así hacerlo " En una reunión posterior, que tuvo lugar el 19 de Marzo, Rubottom manifestó al Embajador Vicchi que " en lo referente al tema del portaaviones, no había posibilidad alguna de facilitar una nave de este tipo a la Argentina. ( 6)
El próximo documento que hallamos, es un telegrama de la embajada norteamericana en Buenos Aires fechado 1 de Marzo de ese año:
" El Ministerio de Marina argentino anunció oficialmente el 28 de Febrero que había vendido los acorazados " Moreno " y Rivadavia, asi como el guardacostas "Pueyrredón"....El Ministerio de Marina agregó que dichos buques serian reducidos a chatarra, y que consideraba el momento oportuno, debido al alto precio (prevalente en el mercado) por dicha chatarra". (7)
No es necesario agregar que el precio de dichas ventas fue utilizado para adquirir al ex-H.M.S. "Warrior", de la armada inglesa, que se convertiría en el A.R.A. "Independencia", nuestro primer portaaviones. Las tratativas para la adquisición de esta unidad se iniciaron en 1957, y por decreto del 16 de Septiembre de 1958 se convalida su compra, satisfaciendo así a un justo requerimiento por parte de nuestra armada.
La entrada en servicio
El 4 de julio de 1958, durante la presidencia del doctor Arturo Frondizi, se anunció la adquisición del portaaviones "HMS Warrior", de la Armada Real británica, que el año anterior había visitado Buenos Aires (7).
Según un matutino porteño, tal anuncio "provocó que se observara, frente a las pizarras de los diarios, a numerosos grupos de personas que comentaban animadamente la noticia. Estos grupos se renovaron durante el resto de la jornada, suscitándose comentarios que en ciertos momentos cobraron animación. Igualmente, en las calles más transitadas, como Florida, Corrientes y Lavalle, se formaron infinidad de grupos de personas que expresaban sus opiniones, originándose, de esta forma, un verdadero debate público sobre la medida adoptada y la incorporación de un nuevo tipo de buque a la Armada".
Tales eran, entonces, las inquietudes de la población en los hoy ignorados temas de defensa. La compra de este tipo de unidad había sido motivo de discusiones durante algún tiempo y su incorporación significó un evento trascendente para la Armada, porque se trataba de una nave distinta, que requería adquirir nuevos conocimientos e implementar adiestramientos específicos de este tipo de buque.
Al comandante designado, capitán de navío Carlos Sánchez Sañudo, se le encomendó la tarea de alistarlo y traerlo en un plazo de tres meses, con una dotación reducida de 300 hombres, incluidos conscriptos. Tales condiciones provocaron distintos grados de descreimiento; en particular, por parte de oficiales británicos, que afirmaban que, para ellos, semejante tarea les insumiría no menos de seis meses, con una dotación de mil hombres previamente instruidos en centros de adiestramiento terrestres.
Con el apoyo de personal de la Armada Real, el alistamiento comenzó el 30 de septiembre de 1958, con el arribo del grueso de la dotación en el transporte "ARA Bahía Buen Suceso". Previamente, se habían adelantado el comandante, con el jefe de Ingeniería y cinco tenientes, con el fin de establecer los lineamientos para encarar la compleja tarea del alistamiento y asegurar su posterior operación en aguas argentinas.
Han transcurridos cincuenta años desde el 4 de noviembre de 1958, cuando se interrumpieron las tareas para dar lugar a un hecho trascendente en el historial del portaaviones; ese día, al izarse el pabellón nacional, dejaba de ser el "HMS Warrior" para pasar a ser el "ARA Independencia".
La ceremonia se ajustó a lo establecido en el protocolo naval, con la asistencia del embajador argentino, contralmirante Teodoro Hartung; el agregado naval, un representante del Almirantazgo británico, autoridades del arsenal (H. M. Dockyard) de Portsmouth y 220 invitados especiales.
Al día siguiente, la prensa argentina informaba del desarrollo de la ceremonia, así como del contenido de los discursos del embajador, el agregado naval y el capitán Sánchez Sañudo, en los que se puso de relieve el apoyo del personal de la Armada Real.
El alistamiento del "ARA Independencia" terminó el 8 de diciembre. Habían transcurrido 69 días desde el arribo del grueso de la reducida dotación; esa jornada, la nave zarpó para una navegación de prueba, que resultó satisfactoria, tras lo cual, el día 10, partió rumbo a la Argentina, para arribar a Puerto Belgrano el 30 de diciembre.
Realizadas las reparaciones y reacondicionamientos faltantes en los talleres de la Base Naval Puerto Belgrano, zarpó, el 3 de junio de 1959, rumbo a golfo Nuevo, donde, el día 8, tuvo lugar el primer anavizaje y consiguiente enganche, protagonizado por un NA 301, maniobra que fue repetida posteriormente por un Corsair. A partir de entonces, pasaron a ser casi rutina las operaciones de vuelo.
Durante su vida útil, tuvieron lugar hitos trascendentes: el 3 de septiembre de ese año, tuvo lugar el primer anavizaje nocturno; el 6 de diciembre, el primer lanzamiento de un Corsair mediante catapulta; el 23 de abril de 1962, el anavizaje del primer bimotor Grumman Tracker antisubmarino y, en agosto del año siguiente, el del primer avión a reacción, un Grumman Panther.
Estos eventos importantes entonces no lo son en portaaviones modernos, que cuentan con medios que evitan el elevado porcentaje de accidentes que tenían lugar durante las operaciones de vuelo en las naves del pasado y que, durante la II Guerra Mundial llegaron a superar las pérdidas originadas por operaciones de combate. Porcentaje que, en el "Independencia", se redujo a un mínimo.
El "Independencia" sirvió en la Armada en los siguientes diez años. En noviembre de 1967, tuvo lugar el anavizaje Nº 5.000, protagonizado por un bimotor Grumman Tracker, y una máquina similar despegó por última vez de su cubierta de vuelo en diciembre de 1968.
El arribo del "ARA 25 de Mayo", ex "Karel Dorman", ex "HMS Venerable", adquirido a la marina holandesa, significó su pasaje a reserva, para ser finalmente desguazado, a partir de 1971.
Al "Independencia" quizá le cabe lo que, hace muchos años, se dijo de la casa de Tucumán en la que tuvo lugar el acontecimiento histórico que dio nombre a ese buque: "Costó poco y sirvió de mucho".
Características
Desplazamiento estándar: 14.000 toneladas.
Con carga completa: 19.000 toneladas.
Eslora máxima: 212 m.
Manga en flotación: 24,4 m.
Manga máxima: 34,3 m.
Aeronaves embarcadas: 35 aviones.
Una catapulta.
Dos ascensores.
Propulsión: dos ejes accionados por turbinas de vapor.
Velocidad: 24,5 nudos.
Dotación: De 1.070 a 1.300 tripulantes.
Foto G. von Rauch, 1969
Fotos Arcbivo General de la Nacion via G.von Rauch, 1980 -Tira con negativos reproducidos por el Sgto (USAF) Wojick enviadas a Juan Araez Cerda Abril, 1988-
ARA Independencia en el puerto de Buenos Aires
En esta imagen se aprecia el famoso caza-bombardero Corsair veteranos de la Segunda Guerra Mundial en el frente japonés.
Linea de vuelo de los Corsair (Corsarios o tambien conocidos como aves negras) de la fuerza aeronaval Argentina.
Tripulación del ARA Independencia en 1960
El ARA Independencia frente a la costa de Río Negro
Notas
(1) Documento No. 835.796./90, 2 de Septiembre de 1938 Embajada de los EEUU de Norteamerica en Buenos Aires al Departamento de Estado en Washington
(2) Documento No 835.34/4-3047, 9 de Enero de 1947, Secretario de Estado a Mr. W.H. collins, Presidente de la División Astilleros de la Bethlehem Steel Co
(3) Hipolito J. Paz, Ministro de Relaciones Exteriores y Culto, en nota no. 359, fechada el 23 de Febrero de 1950 a Stanton Griffis, Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de los Estados Unidos de América en Buenos Aires Documento No. telegrama No. 337, 1 de Marzo de 1950 de la embajada nortemericana en Buenos Aires al Departamento de Estado
(4) Arguindeguy , Pablo. E. , Apuntes Sobre los Buques de la Armada Argentina ( Comando en Jefe de la Armada, C Secretaria General Naval, Departamento de Estudios Historicos Navales, Serie B, Historia Naval Argentina, vols. 1-8 ,Buenos Aires, 1972), ) : V, ; 3050-52, 3064 el Clte. Pablo. E. Arguindeguy
(5) Documento 735.5 MSP/10-2755 Fernando García Olano, Chargé d Affaires, Embajada Argentina en Washington D.C., al Secretario de Estado. Mr. John Foster Dulles
(6) Documento No. 735.562/2/-757 Memorandum de Conversación, Departamento de Estado, 7 de Febrero de 1957, En Otro Memorandum, documento 735.56/2-1 fechado 19 de Marzo de 1957.
(7) Clte. (R) Eugenio Luis Bezzola fue primer jefe de Electrónica del "ARA Independencia" FUENTE.
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Los estudios preliminares de la adquisición
En 1953 se inicio un serio estudio, tendiente a lograr un portaaviones para la Flota de Mar. Un de los proyectos consistia en la transformación de un buque de la F.A.N.U., tipo C3A-A1 (el "Artillero"),el cual a un costo de $m/n 20 millones se pensaba volverlo a su anterior estado, ya que había sido un portaviones de escolta de la armada británica. Otro proyecto era el transformar uno de los cruceros tipo "Almirante Brown" en portaaviones. Los trabajos se realizarían en AFNE. Por problemas financieros, los proyectos no pasaron de tales"
El interés de la ARA en adquirir una nave portaaviones, sin embargo se remonta al año 1938. Entre una serie de sumamente detalladas noticias aeronáuticas concernientes a nuestro país que contiene un reporte de la embajada de los EEUU en Buenos Aires , fechado 3 de Septiembre de 1938 hallamos la siguiente :
" Varios pilotos navales han declarado que el Almirante Scasso había expresado la esperanza de que podría adquirirse un portaaviones para la marina de guerra. Se entiende que no existen prospectos inmediatos de proveer tal tipo de nave, pero se porta que la información es indicativa de las tendencias al respecto". (1)
Estos deseos no se habrían de materializar, como es de dominio publico, algo demostrado en el hecho de que cuando en 1940 el Congreso apropia $ m/n 1000 millones para acrecentar el potencial del país, entre las naves requeridas se hallaban dos acorazados, pero no se hace ya mencion del portaaviones. Debemos señalar que dada la situación internacional prevaleciente, era poco probable que esta parte del programa de re-equipamiento pudiera haberse cumplido. Recien en 1947 hallamos evidencias del renovado deseo, por parte de la ARA, de obtener un portaaviones. En una carta fechada 20 de Diciembre de 1946, W.H. Collin, Vice-Presidente de la División Astilleros de la Betlehem Steel Company informa al Secretario de Estado de los EEUU que la firma que él representa ha recibido una invitación del gobierno argentino para someter propuestas para la construcción de un portaaviones escolta, un crucero liviano, cuatro destructores, 3 submarinos, un buque-taller, un petrolero y un transporte de tropas para la ARA.
En una carta fechada 9 de Enero de 1947, el Secretario de Estado informa a Collins que el gobierno de los EEUU ha estudiado detenidamente esta propuesta, y que "por el presente, la política del gobierno de los EEUU es la de no proveer armas, armamentos o buque de guerra a un número de gobiernos extranjeros, inclusive el de la Argentina, y que en vista a dicha política, el Departamento de Estado no otorgaría una licencia de exportación, en caso de que estos buques sean construidos en los EEUU". (2)
Las relaciones diplomáticas entre los EEUU y la República Argentina mejorarían en años venideros, de tal forma que en 1950 el gobierno argentino cursa la siguiente nota al embajador norteamericano en Buenos Aires:
Ministerio de Relaciones Exteriores No. 369-Año del Libertador General San Martín, Buenos Aires, 23 de Febrero de 1950.
Señor Embajador:
Tengo el agrado de dirigirme a Vuestra Excelencia con el objeto de llevar a su conocimiento que el gobierno argentino desea modernizar el material de que dispone la Marina de Guerra Nacional. Con este motívo, me complazco en solicitar de Vuestra Excelencia quiera tomar a bien transmitir al Departamento de Estado el pedido que oficialmente se formula por la presente, para que, en virtúd de lo dispuesto en la "Ley de ayuda para la defensa mutua de 1949", y teniendo en cuenta lo consignado por la Resolución Pública No.82 del 15 de Junio de 1940 , se considere la posibilidad de transferir elementos de la Marina de Guerra de los Estados Unidos de América a la Marina de Guerra de la República Argentina. La solicitud que se se formula tiene fundamentalmente en cuenta la necesidad de atender al alistamiento de las fuerzas navales de este país para colaborar en la defensa continental, en cumplimiento de los compromisos contraídos por los Estados americanos. Por otra parte, me es grato señalar a la consideración de Vuestra Excelencia que han decidido a este gobierno a efectuar esta gestión diversas comunicaciones de la Marina de Guerra estadounidense que por varios conductos se han hecho llegar, que indican la oportunidad de concretar en forma oficial las necesidades de la Armada Nacional para lograr el objetivo enunciado. Los estudios que al respecto se han realizado han permitido llegar a la conclusión de que es necesario incorporar a la Marina argentina los elementos adecuados para adiestrar al personal que constituíra el núcleo de las fuerzas necesarias en tiempo de guerra, capacitadas para la defensa de los intereses nacionales en el mar y en el concepto de que la Repüblica, en el orden naval, colaborará en la medida de sus posibilidades en la defensa del continente, en la que le correponderán tareas de importancia
Los elementos en cuestión son :
1( un) Portaaviones Escolta, con su dotación de aviones y re3mplazos 3 (tres) Cruceros ( un Crucero pesado y dos livianos, o dos Cruceros pesados y uno liviano) 5 a 7 (cinco a siete) Destructores Escolta 8 1 10 (ocho a diez) Destructores tipo Flota 2 (dos) submarinos de entrenamiento
La lista precedente ha sido confeccionada tomando en cuenta la capacidad normal de absorción, fundada en la disponibilidad de personal técnicamente apto, la capacidad de mantenimiento y reparaciones, el esfuerzo financiero admisible y la relación entre los requerimientos en tiempo de guerra y los nucleos adiestrados en tiempo de paz.
A esta relación se agregan los elementos complementarios tales como : equipos para montar los centros de adiestramiento correspondientes al material que se incorpora, radar, detectores y redes anti-submarinas, equipos para la lucha anti-submarina, equipos para la lucha anti-minas, etc. y en especial todo lo relativo a la aviación naval.
A medida que se incorporen las unidades mencionadas es propósito de las autoridades navales pasar a desarme los buques correspondientes que actualmente estan en servicio en la Marina argentina, de manera que los elementos incorporados signifiquen una modernización y no un aumento del poder naval del país.
He de agradecer a Vuestra Excelencia, que teniendo en cuenta la razones de oportunidad a que se ha hecho referencia anteriormente, quiera tener a bien hacer conocer a la brevedad posible al Departamento de Estado las necesidades arriba expuestas, dejando para más adelante las listas detalladas, el escalonamiento en tiempo de las transferencias y su financiación.
Dios Guarde a Vuestra Excelencia
Hipolito J. Paz Ministro de Relaciones Exteriores y Culto
A Su Excelencia el señor Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de los Estados unidos de América, D. Stanton Griffis.
Un despacho de la embajada norteamericana en Buenos Aires al Departamento de Estado clarificaba la situación :
" Adjunto (hallaran ) el texto y traducción sumaria de la Nota No. 359 del Ministerio de Relaciones Exteriores, recibido hoy en día, referente al deseo de la marina de guerra argentina de obtener varios buques y equipos complementarios. La Argentina no ha ratificado el Pacto de Río y comprendiendo que ese país, por lo tanto puede no ser elegible a obtener equipo bajo las provisiones del Acta de Defensa Mutua de 1949, la nota hace referencia a nuestra Resolución Publica No.83 del 15 de Junio de 1940, bajo la cual el equipo deseado puede ser obtenido.
Tengo entendido que el jefe de nuestro grupo de consejeros navales y el Agregado Naval han comunicado directamente a su departamento la ansiedad de la marina de guerra argentina de no ser excluida cuando buques y otros materiales sean asignados las repúblicas americanas " (3)
El Congreso argentino ratificó el Pacto de Defensa de Río de Janeiro el 28 de Junio, tres días después de haber estallado la guerra de Corea. Debemos preguntarnos que curso dieron las autoridades norteamericanas al substancial pedido de unidades navales por parte de la cancillería argentina. Ante la ausencia de documentos que puedan afirmar o contradecirnos, los EEUU acordaron vender dos cruceros livianos de la clase "Brooklyn" a tres países sudamericanos; Argentina, Brasil y Chile, cada uno de los cuales pudo de esta manera adquirir dos unidades . Como es de dominio público, aquellas naves asignadas a la Argentina fueron el ex-U.S.S. Phoenix (CL 46) que en nuestra armada se convertiría en el "17 de Octubre", y más luego en el "General Belgrano", y U.S.S. Boise (CL 47). que seria bautizado "Nueve de Julio" al afirmarse el pabellón argentino el 12 de Abril de 1951. (4)
Recién en 1955 , hallamos nueva referencias al requerimiento de un portaaviones por parte de la ARA. El 27 de octubre de ese año, nuestro embajador en Washington envía una nota a John Foster Dulles, Secretario de Estado en la que expresa :
Señor Secretario : Tengo el honor de informarle que mi gobierno desea adquirir un portaviones (CV.L. ) y aviones correspondientes. Es de esperar que la operación deba ser similar an su forma a aquella bajo la cual se adquirieron el ex-USS "Boise" y el ex-U.S.S. ""Phoenix" .Demas que decir que no hallamos respuesta alguna a dicha nota en las cajas de correspondencia diplómatica que se encuentran en los Archivos Nacionales de Washington (5 )
.Sin embargo, en una nota fechada 7 de Febrero de 1957, hallamos un pedido efectuado por el Embajador argentino en Washington Dr. Adolfo A. Vicchi:
"1-El embajador indicó que deseaba referirse nuevamente al tema del portaaviones. Han recibido una oferta firme de parte de los británicos, agrego por la venta a la Argentina de un portaaviones de la clase "Magnificent". Esto, sin embargo seria costoso y la marina de guerra argentina quisiera proponer que los EEUU consideren las posibilidades de proveer un pequeño portaaviones de escolta de la clase "Sicily". Este sería utilizado solamente para funciones de entrenamiento. La marina argentina considera que en para poder desarrollar su capacidad anti-submarina , debería entrenar y preparar a su personal en buques de este tipo. Si dicho buque puede ser obtenido en los EEUU, sería de gran valor para ambos, la Argentina y la defensa del hemisferio.
Mr. Rubottom dijo que no veía posibilidad alguna de que los EEUU modificaran su política ya establecida en estos asuntos. El embajador agrego que había sido instruido a presentar ese pedido y pidió que los EEUU lo considerasen. Mr. Rubottom prometió así hacerlo " En una reunión posterior, que tuvo lugar el 19 de Marzo, Rubottom manifestó al Embajador Vicchi que " en lo referente al tema del portaaviones, no había posibilidad alguna de facilitar una nave de este tipo a la Argentina. ( 6)
El próximo documento que hallamos, es un telegrama de la embajada norteamericana en Buenos Aires fechado 1 de Marzo de ese año:
" El Ministerio de Marina argentino anunció oficialmente el 28 de Febrero que había vendido los acorazados " Moreno " y Rivadavia, asi como el guardacostas "Pueyrredón"....El Ministerio de Marina agregó que dichos buques serian reducidos a chatarra, y que consideraba el momento oportuno, debido al alto precio (prevalente en el mercado) por dicha chatarra". (7)
No es necesario agregar que el precio de dichas ventas fue utilizado para adquirir al ex-H.M.S. "Warrior", de la armada inglesa, que se convertiría en el A.R.A. "Independencia", nuestro primer portaaviones. Las tratativas para la adquisición de esta unidad se iniciaron en 1957, y por decreto del 16 de Septiembre de 1958 se convalida su compra, satisfaciendo así a un justo requerimiento por parte de nuestra armada.
La entrada en servicio
El 4 de julio de 1958, durante la presidencia del doctor Arturo Frondizi, se anunció la adquisición del portaaviones "HMS Warrior", de la Armada Real británica, que el año anterior había visitado Buenos Aires (7).
Según un matutino porteño, tal anuncio "provocó que se observara, frente a las pizarras de los diarios, a numerosos grupos de personas que comentaban animadamente la noticia. Estos grupos se renovaron durante el resto de la jornada, suscitándose comentarios que en ciertos momentos cobraron animación. Igualmente, en las calles más transitadas, como Florida, Corrientes y Lavalle, se formaron infinidad de grupos de personas que expresaban sus opiniones, originándose, de esta forma, un verdadero debate público sobre la medida adoptada y la incorporación de un nuevo tipo de buque a la Armada".
Tales eran, entonces, las inquietudes de la población en los hoy ignorados temas de defensa. La compra de este tipo de unidad había sido motivo de discusiones durante algún tiempo y su incorporación significó un evento trascendente para la Armada, porque se trataba de una nave distinta, que requería adquirir nuevos conocimientos e implementar adiestramientos específicos de este tipo de buque.
Al comandante designado, capitán de navío Carlos Sánchez Sañudo, se le encomendó la tarea de alistarlo y traerlo en un plazo de tres meses, con una dotación reducida de 300 hombres, incluidos conscriptos. Tales condiciones provocaron distintos grados de descreimiento; en particular, por parte de oficiales británicos, que afirmaban que, para ellos, semejante tarea les insumiría no menos de seis meses, con una dotación de mil hombres previamente instruidos en centros de adiestramiento terrestres.
Con el apoyo de personal de la Armada Real, el alistamiento comenzó el 30 de septiembre de 1958, con el arribo del grueso de la dotación en el transporte "ARA Bahía Buen Suceso". Previamente, se habían adelantado el comandante, con el jefe de Ingeniería y cinco tenientes, con el fin de establecer los lineamientos para encarar la compleja tarea del alistamiento y asegurar su posterior operación en aguas argentinas.
Han transcurridos cincuenta años desde el 4 de noviembre de 1958, cuando se interrumpieron las tareas para dar lugar a un hecho trascendente en el historial del portaaviones; ese día, al izarse el pabellón nacional, dejaba de ser el "HMS Warrior" para pasar a ser el "ARA Independencia".
La ceremonia se ajustó a lo establecido en el protocolo naval, con la asistencia del embajador argentino, contralmirante Teodoro Hartung; el agregado naval, un representante del Almirantazgo británico, autoridades del arsenal (H. M. Dockyard) de Portsmouth y 220 invitados especiales.
Al día siguiente, la prensa argentina informaba del desarrollo de la ceremonia, así como del contenido de los discursos del embajador, el agregado naval y el capitán Sánchez Sañudo, en los que se puso de relieve el apoyo del personal de la Armada Real.
El alistamiento del "ARA Independencia" terminó el 8 de diciembre. Habían transcurrido 69 días desde el arribo del grueso de la reducida dotación; esa jornada, la nave zarpó para una navegación de prueba, que resultó satisfactoria, tras lo cual, el día 10, partió rumbo a la Argentina, para arribar a Puerto Belgrano el 30 de diciembre.
Realizadas las reparaciones y reacondicionamientos faltantes en los talleres de la Base Naval Puerto Belgrano, zarpó, el 3 de junio de 1959, rumbo a golfo Nuevo, donde, el día 8, tuvo lugar el primer anavizaje y consiguiente enganche, protagonizado por un NA 301, maniobra que fue repetida posteriormente por un Corsair. A partir de entonces, pasaron a ser casi rutina las operaciones de vuelo.
Durante su vida útil, tuvieron lugar hitos trascendentes: el 3 de septiembre de ese año, tuvo lugar el primer anavizaje nocturno; el 6 de diciembre, el primer lanzamiento de un Corsair mediante catapulta; el 23 de abril de 1962, el anavizaje del primer bimotor Grumman Tracker antisubmarino y, en agosto del año siguiente, el del primer avión a reacción, un Grumman Panther.
Estos eventos importantes entonces no lo son en portaaviones modernos, que cuentan con medios que evitan el elevado porcentaje de accidentes que tenían lugar durante las operaciones de vuelo en las naves del pasado y que, durante la II Guerra Mundial llegaron a superar las pérdidas originadas por operaciones de combate. Porcentaje que, en el "Independencia", se redujo a un mínimo.
El "Independencia" sirvió en la Armada en los siguientes diez años. En noviembre de 1967, tuvo lugar el anavizaje Nº 5.000, protagonizado por un bimotor Grumman Tracker, y una máquina similar despegó por última vez de su cubierta de vuelo en diciembre de 1968.
El arribo del "ARA 25 de Mayo", ex "Karel Dorman", ex "HMS Venerable", adquirido a la marina holandesa, significó su pasaje a reserva, para ser finalmente desguazado, a partir de 1971.
Al "Independencia" quizá le cabe lo que, hace muchos años, se dijo de la casa de Tucumán en la que tuvo lugar el acontecimiento histórico que dio nombre a ese buque: "Costó poco y sirvió de mucho".
Características
Desplazamiento estándar: 14.000 toneladas.
Con carga completa: 19.000 toneladas.
Eslora máxima: 212 m.
Manga en flotación: 24,4 m.
Manga máxima: 34,3 m.
Aeronaves embarcadas: 35 aviones.
Una catapulta.
Dos ascensores.
Propulsión: dos ejes accionados por turbinas de vapor.
Velocidad: 24,5 nudos.
Dotación: De 1.070 a 1.300 tripulantes.
Foto G. von Rauch, 1969
Fotos Arcbivo General de la Nacion via G.von Rauch, 1980 -Tira con negativos reproducidos por el Sgto (USAF) Wojick enviadas a Juan Araez Cerda Abril, 1988-
ARA Independencia en el puerto de Buenos Aires
En esta imagen se aprecia el famoso caza-bombardero Corsair veteranos de la Segunda Guerra Mundial en el frente japonés.
Linea de vuelo de los Corsair (Corsarios o tambien conocidos como aves negras) de la fuerza aeronaval Argentina.
Tripulación del ARA Independencia en 1960
El ARA Independencia frente a la costa de Río Negro
Notas
(1) Documento No. 835.796./90, 2 de Septiembre de 1938 Embajada de los EEUU de Norteamerica en Buenos Aires al Departamento de Estado en Washington
(2) Documento No 835.34/4-3047, 9 de Enero de 1947, Secretario de Estado a Mr. W.H. collins, Presidente de la División Astilleros de la Bethlehem Steel Co
(3) Hipolito J. Paz, Ministro de Relaciones Exteriores y Culto, en nota no. 359, fechada el 23 de Febrero de 1950 a Stanton Griffis, Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de los Estados Unidos de América en Buenos Aires Documento No. telegrama No. 337, 1 de Marzo de 1950 de la embajada nortemericana en Buenos Aires al Departamento de Estado
(4) Arguindeguy , Pablo. E. , Apuntes Sobre los Buques de la Armada Argentina ( Comando en Jefe de la Armada, C Secretaria General Naval, Departamento de Estudios Historicos Navales, Serie B, Historia Naval Argentina, vols. 1-8 ,Buenos Aires, 1972), ) : V, ; 3050-52, 3064 el Clte. Pablo. E. Arguindeguy
(5) Documento 735.5 MSP/10-2755 Fernando García Olano, Chargé d Affaires, Embajada Argentina en Washington D.C., al Secretario de Estado. Mr. John Foster Dulles
(6) Documento No. 735.562/2/-757 Memorandum de Conversación, Departamento de Estado, 7 de Febrero de 1957, En Otro Memorandum, documento 735.56/2-1 fechado 19 de Marzo de 1957.
(7) Clte. (R) Eugenio Luis Bezzola fue primer jefe de Electrónica del "ARA Independencia" FUENTE.
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