El gobierno anunció que enviará un proyecto de ley al Congreso para que el 51% de YPF se expropie y se subdivida de forma tal que el 51% sea del Estado nacional y el 49% se distribuya entre las provincias pertenecientes al consejo federal de hidrocarburos.

Actualmente la empresa se encuentra bajo el control de la española Repsol y del grupo empresario argentino de la familia Eskenazi.

También se declarará de interés público nacional la actividad de hidrocarburos del territorio de la República Argentina.

La mandataria firmó un decreto de necesidad de urgencia para intervenir YPF y nombró a Julio De Vido como el interventor oficial. 

“Somos el único país en Latinoamérica y uno de los pocos del mundo que no maneja sus recursos naturales”, dijo Cristina.

“En 2011 hubo un déficit de 3029 millones de dólares. Es la primera vez en 17 años que la Argentina tiene que importar gas y petróleo”, agregó.

“En 2011 tuvimos que importar 9397 millones de dólares”, detalló.

Y aseguró que “de proseguir esta política de vaciamiento de no exploración nos tornaríamos en un país inviable por políticas empresariales y no por falta de recursos”.

“Desde el 2001 se redujeron las reservas un 50% sin embargo las ganancias de las empresas no se redujeron”, indicó.

Y añadió: “El año que más combustible tuvimos que importar fue el año que más ganancias tuvo YPF”.

Cristina leyó un artículo del diario español El País, donde se agraviaba a YPF antes de la privatización.  ”No voy a contestar agravios y faltas de respeto porque soy una jefa de estado y no una patotera”, manifestó.

Y remarcó: “No es un modelo de estatización es un modelo de recuperación de la soberanía y control de un instrumento fundamental”.

Además subrayó la federalización del proyecto: “De aprobarse la ley la nacional y las provincias siempre van a tener que votar en la misma dirección”.

La presidenta llamó a todos los trabajadores y estacioneros a luchar por los recursos de todos los argentinos.